Sin título ["A petición del Ilustre Cabildo, comisionó..."]. Extracto del informe del Regidor don Tomás Vicuña sobre las escuelas existentes en Santiago

 

 

 

A petición de el Ilustre Cabildo, comisionó el Superior Gobierno al Regidor don Tomás Vicuña para la visita general de las escuelas, cuya diligencia exacta y puntual pasó al Ilustre Cabildo en un prolijo pormenor; por no molestar con tan larga lectura, se anuncian los últimos parágrafos:


"De toda esta diligencia se manifiesta que solamente hay 7 escuelas enseñando, y dos próximas a hacerlo; que en todas las 7 se enseñan el número de 664 niños que es muy pequeño en proporción a la población que, según cálculo de matrículas parroquiales pasa de 50.000 habitantes; que esta falta de escuelas degrada sobremanera a este cuerpo encargado de la baja policía; que asimismo influye en la falta de ilustración pública; que imposibilita a los hombres para mejores destinos. Es pues de necesidad que se arbitren medios de aumentar las escuelas, y de obligar a los padres de familias pobres que los destinen precisamente a que aprendan a leer y escribir y contar; de este modo tendríamos mejores artesanos, tendríamos mayordomos para haciendas y chacras, tendríamos gente para el ejército más bien dispuesta, y todos estarían mejor instruidos en nuestra sana moral.


Convendrá pues que necesariamente se establezca escuela en Santo Domingo de el modo insinuado, y que se ponga de maestro al Reverendo Padre Fray Javier Guzmán, dominicano recomendable por su patriotismo. Que por el mismo estilo se funden dos más en la Cañada, una en el colegio de los padres agustinos, y así mismo otra en el convento de San Miguel. Después de organizadas las 12 escuelas se verá el número de enseñados que concurran, y si es de necesidad que se establezcan otras.


Convendría que este mismo orden se mandase observar en todos los conventos del reino, a efecto de que se aumentasen las escuelas, y en todos los curatos igualmente, de manera que el Sota Cura se hiciese cargo de la escuela, y en teniendo más de 20 niños le corriera el tiempo para jubilar de lector siendo religioso, y siendo clérigo le sirva su mérito en igual grado que al cura teniendo más de los 20 niños a enseñanza de leer, escribir y contar.


Para auxiliar a los pobres sería conveniente que el Cabildo costease la impresión de mil cartillas y mil catones para distribuir de cuando en cuando en las escuelas; que así mismo se nombre un señor regidor protector de escuelas que mensualmente las visite y avise de cuanto juzgue conveniente informar al cuerpo.


Santiago y Noviembre 25 de 1812.