Hacia 1873-78 dos crisis se entrecruzan: la crisis en superficie (monetaria) y la crisis en profundidad (estructural). El agotamiento del modo de
producción colonial y su reemplazo por uno de nuevo tipo (capitalista) ocurrirá en nuestro país hacia 1860-801. Estas décadas presenciaron numerosos cambios económicos y sociales: agrarios, mineros e industriales.